En su tarjeta de visita, se lee “dibujante entre otras cosas” y su Currículum Vitae lo confirma. Mauro Entrialgo (en la ilustración) es un contador de historias o quizás un humorista, que lleva más de 30 años desahogándose a través de sus dibujos y sacándonos sonrisas, de las reflexivas. Hoy, Jueves 29 de mayo de 2014, presenta la séptima entrega de uno de sus personajes que ya es todo un clásico: Ángel Sefija por los siete mares. Una recopilación de las nuevas aventuras del gran observador de mediana edad y clase media, cuyas disertaciones gráficas llevan publicándose en El Jueves, desde mediados del año 2000.

   El dibujante, guionista y músico -al que le gusta decir que se dedica a la ilustración porque le divierte, vive de ello y es su mejor terapia- no recuerda cuándo empezó a dibujar, o mejor dicho, siempre se pregunta cuándo los demás dejaron de hacerlo. Para Mauro, un dibujante no decide pintar sino que sigue haciéndolo ya que todos lo hemos probado en algún momento. En su caso, además de dejar señales desde pequeño, se comía visualmente los tebeos antes, si quiera, de saber leer, y con solo 13 años ya dejaba plasmado su arte en fanzines y revistas escolares.

   Su primer trabajo remunerado llegó en 1982 cuando Entrialgo tenía 17 años. Pintó con Titanlux un punki llevando una guitarra, en una de las paredes de un bar de Vitoria, llamado El Pérez, que le pagó 2.000 pesetas por su obra (y servicio). Desde entonces, intentar llevar un registro de todo lo que ha hecho es una tarea prácticamente imposible. Su obra es tan prolífica que, hace poco, publicó El dibujosaurio (con más de 400 páginas), donde Mauro intentó reunir -al margen de la historieta- sus trabajos de ilustración (postales, invitaciones, calendarios, carteles, portadas de discos, pegatinas, cromos, etc.), pero ya lleva apuntadas 40 obras que olvidó incluir. Es más, si Entrialgo hubiese acudido a cada festival, película, discoteca, exposición o concierto para los que ha hecho una ilustración, no habría pisado el suelo de su casa en meses.

   Para desvelar el secreto de tanto trabajo, hay que “desmontar el mito”. Como trabaja en casa, no tiene coche, no practica deporte y no ve televisión en directo, Entrialgo no tiene que desplazarte, ni buscar aparcamiento, ni enterarse de los entresijos de los futbolistas, lo que le permite -dice- disponer del tiempo necesario para crear. Aún así, su agenda marca, al menos, un acto o presentación suya cada mes. Pero, aunque hubo un momento en que se planteó tener un asistente, el dibujante con los pies bien amarraditos a la tierra entendió al minuto que, si otra persona enviaba sus paquetes, cogía el teléfono, hacía la compra o bajaba la basura, él no podría hacer historietas sobre el día a día porque, precisamente, habría dejado de vivirlo.

   Su estilo es inconfundible, y el propio interesado confiesa que le gusta que reconozcan su trazo al instante. Para Entrialgo, el sello personal es un conjunto de decisiones técnicas y conceptuales que se toman a la hora de representar la realidad o lo imaginado. El que no las sigue, podrá ser más versátil pero perderá su identidad o autoría artística.  

   Admirador de una lista de dibujantes (Muntañola, Bill Griffith, Hergé, Coll, Shelton, Crumb, Tezuka, Chumy Chúmez, Glen Baxter, Schultz, etc.) tan interminable como su obra, Entrialgo cree que en España aún nos queda mucho por aprender de la cultura de la ilustración. Por eso y por el interés -como dice Entrialgo- “desleído” de parte de las grandes marcas por su obra, prefiere trabajar para el dueño de un bar de barrio, que le da lo que puede, en lugar de hacerlo para grandes multinacionales que no pagan decentemente y que, además, le vuelven loco con retoques de última hora, reuniones y cláusulas de contrato abusivas. Para Entrialgo, el movimiento creativo más interesante, se encuentra ahora, más que nunca, al margen de las instituciones y marcas comerciales. Y cree que son las editoriales pequeñas, las iniciativas particulares -casi por amor al arte- y los pequeños comercios, los que tiran de lo que queda del carro de la cultura que han estado saqueando los más grandes durante años.

   Así de claro es y así lo refleja en su obra. Una vez más, Entrialgo, bajo la identidad del sagaz Sefija, aplica su contundente crítica poniendo el dedo en la llaga abierta por todo tipo de barbaridades, injusticias y tonterías de nuestro tiempo. Pero, además de puntualizar y de opinar, razona y, hasta el momento, “se ha fijado” en 719 asuntos distintos, como indica el número de la última página entregada por Mauro, a la revista El Jueves, con la que ha tenido la relación profesional más extensa en el tiempo y, según cuenta, también la más fructífera en lo creativo. De hecho, no se le escapa nada: sociedad, consumo, relaciones personales, urbanismo, política, arte, rock…

   Precisamente la música es otra de las disciplinas que ha tocado Mauro gracias a su experiencia como guitarrista y voz -a partir de 1992- en la banda Fat Esteban, reconvertida -en el 97- en Esteban Light. Actualmente, junto al bajo y al batería de su grupo, Entrialgo está de gira con los Tiki Twangers, un proyecto de conciertos dibujados de música de western swing que ilustra en directo y que explica porqué ha elegido un espacio relacionado con el universo musical para presentar el último volumen de Sefija: Headbanger, la inusual tienda de guitarras de segunda mano con historia de la calle de La Palma. Sabe que la labor de difusión de las pequeñas tiendas de cómics es fundamental, pero a veces disfruta saliendo del “ghetto” (dixit Entrialgo), llevando la historieta a otros espacios que le gustan y que encajan perfectamente con sus viñetas.

   Sea en sus carteles, pósters, murales o historietas, en una feria de cómics o en una galería, Entrialgo va a seguir gritando a los cuatro vientos o, en este caso, a los siete mares, todo aquello que le hace retorcerse en su silla y agarrar un lápiz para crear.

   ¡Larga vida al dibujante que no puede callar… de dibujar!

PD nº1: Presentación de Ángel Sefija por los siete mares de Mauro Entrialgo (Astiberri)

¿CUÁNDO? El Jueves 29 de mayo de 2014, a las 19h30.

¿DÓNDE? En Headbanger Rare Guitars

Calle de la Palma, 73

28015 Madrid

910 248 959

M Plaza España / San Bernardo / Noviciado

¿CUÁNTO? Entrada gratuita.


Más info en la web de HEADBANGER RARE GUiTARS (también en Facebook y Twitter).

PD nº2: Ilustración, arte, música, libros, video, cine, teatro.. no hay soporte que no haya probado Entrialgo. De hecho, hay bastantes lectores que se han tatuado algunos de sus dibujos. ¿Sabéis cuál se lleva la palma? Otro de sus clásicos: Herminio.

PD nº3: Su blog Productos defectuosos es otra de sus vías de escape, que nació de la imposibilidad de dar su verdadera opinión cuando trabajaba para determinados medios de comunicación que viven, sobre todo, de la publicidad. Al ser bastante difícil mencionar de manera poco positiva, en un artículo periodístico o en una historieta, a cualquier marca que pueda ser un posible anunciante, Mauro creó un espacio virtual para poder hablar de consumo sin tener que cortarse a la hora de mencionar marcas concretas.

PD nº4: Entrialgo también publica historietas digitales porque cree que hay que adaptarse al momento actual. El dibujante no quiere perder el tiempo llorando por la inminente desaparición de los medios tradicionales, porque entonces no conocerá los nuevos medios donde probablemente requerirán su trabajo.

PD nº5: Aunque nació en Vitoria, Mauro Entrialgo vive en Madrid, la ciudad menos mala que conoce para vivir. Así la describe: “Su mezcla de gran urbe urbanística y capital política con modos estéticos y organizativos de pueblo, puede causar cierta perplejidad al forastero, pero también la caracteriza de un modo entrañable y, en cierto modo, la hace más humana”.

                                                                (De Lidia Martín, 29 de mayo de 2014)

Referencias útiles:
Para seguir los pasos ilustrados de MAURO ENTRiALGO, conéctate a su web, su Facebook y su Twitter.

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