Hoy, Jueves 16 de enero de 2014, aprovechando que este año se celebra el centenario del nacimiento del pintor y grabador granadino, José Guerrero, la Casa de Velázquez acoge “una exposición (multinacional y generacional) sin pretensiones, según el propio comisario Pablo Sycet, que trata de rendir homenaje a un pintor fundamental en el arte español del cambio de siglo”. Una oportunidad única para disfrutar de un experimento expositivo de “arte encontrado” al más puro estilo de Marcel Duchamp.

   José Guerrero nació en 1914 en el seno de una familia humilde andaluza. A los 14 años, dejó el colegio y se puso a trabajar. Haciendo malabares para no renunciar al aprendizaje, se apuntó a la Escuela de Artes y Oficios en horario nocturno y, durante sus horas libres, pintaba en el campanario de la Catedral de Granada (que otrora había sido el taller del pintor barroco Alonso Cano) donde le dejaban pintar a cambio de que, cuando se le indicase, tañera las campanas. Pasaron los años y una guerra (in)civil y, en 1942, se instaló en Madrid, en la Casa de Velázquez -institución de la cultura francesa (como su nombre NO indica)- que apoyaría a partir de entonces su carrera pictórica. 

   Su biografía continúa y está llena de viajes: pasa por París, Bélgica, el norte de Europa, Roma -donde se enamora de una periodista estadounidense-, París de nuevo -donde conoce, entre otros, a Pablo Picasso, Joan Miró y Juan Gris-, Londres -donde se casa en 1945 con Roxanne Pollock (la periodista)-, y finalmente, Nueva York donde la pareja se establece en 1950.

   Aunque viajara a España en muchas ocasiones (durante unos años vivió con su familia en el número 50 del Paseo de la Habana), la Gran Manzana fue para el pintor granadino la horma de su zapato. En ella, se movió como pez en el agua por los más exclusivos rincones de la bohemia neoyorkina: sedujo a galeristas como Patty Parson (que se convertiría en la marchante de sus obras), cautivó al director del Guggenheim, entabló amistad con Rothko, Steinberg, Lindner, Motherwell o Line, compartió beca con Mies Van de Roe o Chillida y veladas con las familias de Federico García Lorca y Francisco Giner de los Ríos en el exilio, entre muchas otras grandes cosas.

   Para rendir homenaje al considerado maestro en el estudio y el uso del color con vigor y entusiasmo -que fue parte integrante de la segunda generación de expresionistas abstractos de la llamada “Escuela de Nueva York”-, la exposición “La Bolsa y la Vida” juega con la interpretación de uno de los objetos cotidianos que Guerrero utilizó, en los años 60, como nuevo soporte y recurso técnico, en una vuelta de tuerca más al “objet trouvé” duchampiano: las bolsas (no de valores sino de papel). Con aquel símbolo consumista (y materialista) por excelencia y como guiño al arte Pop -en pleno auge en aquel momento y que, por otro lado, el autor repudiaba-, el pintor en constante (r)evolución creó una serie de obras que, al integrar bolsas en sus pinturas, rompió con la constante bidimensional que había marcado su trayectoria artística hasta entonces. Esas obras jamás se exhibieron y, por ello, hoy, se les rinde homenaje.

   Además de las obras inéditas del pintor, el público descubrirá la intervención realizada por 73 artistas (de distintas partes del mundo) en 77 bolsas, una por cada año de vida de Guerrero. “La Bolsa y la Vida”, una muestra donde continente y contenido se entremezclan hasta confundirse/te.

                                                       (De Noemí Z., el 15 de enero de 2014)

Referencias útiles:
“LA BOLSA Y LA ViDA”. Homenaje al José Guerrero en el centenario de su nacimiento.

¿CUÁNDO? Desde el Jueves 16 de enero hasta el Sábado 15 de febrero de 2014, de Lunes a Domingo, de 10h a 20h.

¿QUÉ? Para darle forma a esta exposición, se ha convocado a un extenso grupo de creadores contemporáneos con la premisa de “salvar de su previsible destino final una de las bolsas que han llegado a sus vidas al realizar alguna compra y la intervengan para convertirla en una obra de arte subvirtiendo los papeles de continente y contenido”.

¿QUiÉN? Por orden alfabético, Ángeles Agrela, Alfonso Albacete, Vivian Asapche, Antonio Belmonte, José María Bermejo, Marta Blanca Moral, Amaya Bozal, Sonsoles Brilhantes,  Juan Manuel Castro Prieto, José M. Chico López, Javier Chozas, Victoria Civera, Manuel Cohen, Rufino de Mingo, Gerardo Delgado, Manolo Dimas, Dis Berlín, Cristian Domecq, Mareta Espinosa, Kiko Feria, Moisés Fernández Acosta, Juan Fernández Lacomba, Belén Franco, Laura Franco Carrión, Paloma Gámez, Cristina Gamón, Rafael García Tejero, León Garreaud de Mainvilliers, Alonso Gil, María Gómez, Jaime Gorospe, Verónica Hernández, José Manuel Hortelano, Amelia Jiménez, Luis Jurado, Julio Juste, Miki Leal, Carlos León, Víctor López-Rúa, Sean McKaoui, Miguel Marina Cobo, Alberto Martín Giraldo, Rita Martorell, Din Matamoro, Lita Mora, José Morea, Kimiko Nonomura, José Manuel Nuevo, Genison Oliveira, David Paquet, Guillermo Pérez Villalta, José Piñar, Francesco Pistolesi, Javier Porto, Faustino Rodríguez, Antonio Rojas, Pepea Rubio, Tamim Sabri, Martín Sampedro, Miluca Sanz, Juan Manuel Seisdedos, Nelly Stetenfeld, Pablo Sycet, Jordi Teixidor, Miguel Ángel Tornero, Ignacio Tovar, Juan Uslé, Vicky Uslé, Vargas, Joan Verdú,  Juliette Vivier, Simón Zabell, y Jesús Zurita.

¿DÓNDE? En la Casa de Velázquez
Calle de Paul Guinard, 3
28040 Madrid
914 551 580
M Ciudad Universitaria

¿CUÁNTO? Entrada libre y gratuita.

Para saberlo todo sobre “LA VIDA Y LA BOLSA”, conéctate a la web de la CASA DE VELÁZQUEZ (también en Facebook y Twitter).

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