Fue una figura inusual en las letras españolas del siglo XIX. Autor de asombrosa capacidad creativa, escribió novelas, obras de teatro, libros de memorias, ensayos y varias decenas de relatos históricos, que explicaban la situación política y social española desde la Guerra de la independencia hasta el reinado de Isabel II. Además, fue un curioso lector, atento a las novedades procedentes de Europa, un convencido liberal y un furibundo anticlerical.

   Todo ello, lejos de procurarle la gloria literaria y social, le generó no pocas envidias y animadversión por parte de colegas, miembros del clero, políticos conservadores y burgueses reaccionarios. Aunque ese rechazo impidió que obtuviera premios internacionales como el Nobel, su influencia ha calado profundamente en la sociedad española. Además de influir a escritores de generaciones posteriores, de acuñar el término “galdosiano” (que está incluido en el diccionario de la Real Academia), Benito Pérez Galdós (1843-1920) ha sido capaz de dejar su impronta en la ciudad de Madrid que aparece en sus muchas obras.

   Con motivo de la celebración del 175º aniversario de su nacimiento este año, La Noche de los Libros le rendirá homenaje mañana, Viernes 20 de abril de 2018, con varias actividades. Mientras tanto, he aquí (Mi Petit) Diccionario, que repasa la obra del máximo representante del Realismo español.

ACADÉMiCO En 1897, Benito Pérez Galdós (retratado aquí) fue nombrado miembro de la Real Academia Española. Sus colegas de profesión, algunos de los cuales lo aborrecían por sus ideas liberales, por su anticlericalismo y por su éxito literario, no pudieron negarle esta distinción. Sin embargo, su más que merecida candidatura al Premio Nobel de Literatura nunca prosperó, justamente por esa animadversión y falta de apoyos de colegas e instituciones españolas, claramente reaccionarias.

BUÑUEL El realizador aragonés, Luis Buñuel (1900-1983), era un gran admirador de la obra de Galdós y de sus personajes. En conversación con Max Aub para el libro de memorias que escribieron juntos, Buñuel afirmó que Galdós era “la única influencia que yo reconocería, así en general, sobre mí”. Sin embargo, esa influencia llegó tarde ya que, en su juventud, Buñuel y sus amigos eran más bien antigaldosianos: “Galdós nos parecía anticuado y un poco farragoso. Fue más tarde, en el exilio (en mi primer viaje a los Estados Unidos, el de los años 30) cuando empecé de verdad a leerlo, y entonces me interesó. Encontré en sus obras elementos que podríamos incluso llamar ‘surrealistas’: amor loco, visiones delirantes, una realidad muy intensa con momentos de lirismo”. Esa admiración tardía provocó que, posteriormente, varias de sus películas se basasen en obras del autor canario, como “Tristana”, “Nazarín”, e incluso, “Viridiana”, que está inspirada en la novela Halma.

CHARLES DiCKENS A pesar de ser un gran lector, que dominaba el castellano, el francés y el inglés (lo que le permitía disfrutar de obras que todavía no habían sido traducidas al castellano), Galdós nunca mostró demasiado interés por convertirse en traductor. La única incursión, que realizó en este campo, fue en 1868 para volcar al español Los papeles póstumos del Club Pickwick, de Charles Dickens. En el prólogo, que escribió a esa traducción, el escritor canario afirmaba sobre el inglés: “Difícil es dar una idea de la maravillosa aptitud de Carlos Dickens para comprender el corazón humano y retratar al vivo sus grandes borrascas, sus expansiones de ternura y amor. No analiza como Balzac, complaciéndose en descubrir todo lo que de innoble y siniestro puede existir en los sentimientos del hombre; es, por el contrario, observador benévolo, que procede en los trabajos de su investigación por amor a la humanidad, deseoso de la dicha del hombre y haciéndole ver sus virtudes y sus vicios para enaltecer aquéllas y corregir éstos”.

DENEUVE, CATHERiNE Después del escándalo provocado por “Viridiana” (1961), Luis Buñuel pasó años sin poder entrar en territorio español por prohibición expresa de las autoridades franquistas. En 1970, ya con pasaporte mexicano, Buñuel pudo viajar a Toledo para rodar “Tristana”, su personal adaptación de la novela de Pérez Galdós en la que el aragonés se permitió incluso cambiar el final. Convencido de que al escritor canario no le importaría, Buñuel presentó a una Tristana perversa que, lejos de resignarse a vivir junto al anciano Don Lope, idea una artimaña para acelerar su muerte. La película, protagonizada por Catherine Deneuve en el papel de Tristana, fue candidata al Oscar de Hollywood, pero perdió ante “Investigación sobre un ciudadano libre de toda sospecha”, de Elio Petri, que también está muy bien, todo sea dicho.

EMiLiA PARDO BAZÁN La escritora y aristócrata gallega, Emilia Pardo Bazán (1851-1921), mantuvo un tórrido romance con Benito Pérez Galdós, que se alargó durante años sin importar que ambos estuvieran casados o mantuvieran otras relaciones sentimentales. Recientemente se publicó Miquiño mío, un libro en el que se recopilaban algunas de las cartas que ambos escritores se intercambiaron y en las que se podían leer frases como “Te como un pedazo de mejilla y una guía del bigote”, que es como se decía en el siglo XIX “te como la boca”; o también “Ven a tomar posesión de estos aposentos escultóricos. Aquí está una buitra esperando por su pájaro bobo, por su mochuelo [...] Hay en mí una vida tal afectiva y física, que puedo sin mentir decir que soy tuya toda: toda, me has reconquistado de muchas maneras y más que nada porque nunca me habías perdido; porque te quise ayer y te querré mañana”. Cosas de personas normales, que no se explican en los manuales de literatura porque algún carca pensará erróneamente que desprestigian a estos dos grandes literatos.

FORTUNATA En 1887, influido por las corrientes literarias procedentes de Francia que apostaban por la novela realista, Benito Pérez Galdós escribió la novela Fortunata y Jacinta (1887), subtitulada “Historia de dos casadas”, que narra la relación de odio que mantienen Fortunata, una chica joven de clase baja, y Jacinta, una adinerada joven. Ambas están enamoradas de Juanito Santa Cruz, calavera sin escrúpulos que, aunque está casado con Jacinta, frecuenta a Fortunata y le da esperanzas de que dejará a su esposa para irse a vivir con ella. Para forzar la situación y obligarle a cumplir su palabra, Fortunata decide quedarse embarazada del adúltero y dar a luz a un hijo suyo, que se convierte en una pequeña victoria en su lucha con Jacinta, dado que esta no puede tener hijos. Calificada por muchos críticos como la mejor obra de Galdós, Fortunata y Jacinta es sin duda la más popular desde que, en 1980, Televisión Española realizara una serie de 10 capítulos dirigida por Mario Camus, en la que Ana Belén interpretaba a Fortunata y Maribel Martín a Jacinta.

GARBANCERO Uno de los insultos con los que los enemigos de Galdós lo obsequiaban era el de “garbancero”. Incluso Valle-Inclán utilizó el apelativo en boca de un poeta modernista venido a menos cuando dice en la escena cuarta de “Luces de Bohemia”: “Precisamente ahora está vacante el sillón de Don Benito el Garbancero”. El adjetivo, según la Real Academia significa “Perteneciente o relativo al garbanzo. / Persona que trata en garbanzos. / Persona que vende torrados. / Persona o cosa ordinaria y vulgar”.

HORTALEZA En el nº104 de la calle Hortaleza estaba la editorial “Obras de Pérez Galdós”, en la que el escritor publicaba y vendía muchas de sus creaciones, especialmente los Episodios Nacionales. La editorial permaneció en dicho lugar desde su apertura en 1897 y hasta su cierre por problemas económicos en 1904. En la actualidad, hay una placa conmemorativa en la fachada del edificio, que se suma a las otras dos que conmemoran el paso de Galdós por Madrid: la de la calle Fuentes nº3, donde residió el escritor a su llegada a la ciudad, y la de la calle Fomento 17, en la que estuvo El Debate, periódico que dirigió.

iNTERMiNABLE Inspirándose en los Episodios nacionales, de Benito Pérez Galdós, Almudena Grandes inició en 2010 con Inés y la alegría, una serie de novelas sobre la Guerra (in)Civil, que denominó “Episodios de una guerra interminable”. Hasta el momento, hay ya 5 volúmenes de esa serie compuesta, además de por la ya citada, por El lector de Julio Verne, Las tres bodas de Manolita, Los besos en el pan y Los pacientes del doctor García.

JOVEN DE PROVECHO (UN) La obra de Galdós abarca narrativa, artículos periodísticos, ensayos, memorias y teatro. De hecho, las primeras obras, que escribió, fueron de género dramático. Tragedias y comedias como “Quién mal hace, bien no espere”, “La expulsión de los moriscos” (que no se ha conservado) y “Un joven de provecho”, comedia que se publicó póstumamente. A pesar de ello, la madurez como escritor dramático le llegaría a Galdós con “Realidad”, estrenada en 1892, a la que seguiría la versión teatral de “La loca de la casa”, y las obras “La de San Quintín”, “Electra” y “Casandra”. También intentó adaptar al teatro el Episodio nacional titulado “Gerona”, pero resultó ser un fracaso de público.

KARLFELDT El poeta sueco, Erik Axel Karlfeldt (1864-1931), era el secretario permanente de la Academia Sueca en la época de Galdós. Cuando fue preguntado por las reiteradas negativas de la Academia de concederle al escritor español el Premio Nobel, Erik Axel Karlfeldt argumentó que se habían recibido en la institución miles de telegramas que se oponían a esa posible concesión. Ante semejante clima de presión, los suecos prefirieron plegarse a los deseos de los detractores de Galdós y no premiarle.

LEÓN ROCH En su novela La familia de León Roch (1878), Benito Pérez Galdós muestra sus opiniones negativas sobre la religión y su posicionamiento en favor de la razón y la cultura. Para ello se vale de León Roch, un joven brillante y con éxito que se casa con María Egipciaca, una fanática religiosa, hermana de un sacerdote, que se cree santo y cuyos padres son un par de caraduras que solo pretenden vivir a costa de la fortuna de Roch. La trama se complica cuando León Roch, que se ve incapaz de reconducir un matrimonio en el que tienen más influencia los confesores y las monjas que él, se da cuenta de que continúa enamorado de una antigua novia que, al enterarse que él se iba a casar con María, hizo lo propio con un jovencito tarambana y calavera. Un dramón, vaya.

MiAU Doña Pura y su hija Abelarda parecen dos gatas, por eso en el barrio y cuando van a las funciones del Teatro Real las llaman las Miau. Así llaman también en el colegio a Luisito, el hijo de Abelarda y Víctor Cadalso, un calavera al que el patriarca de la familia, el Señor Villaamil no puede ni ver porque, mientras que él se pasa los días intentando que le den un puesto en la administración pública, el deshonesto de Cadalso no para de cosechar éxitos como funcionario. Poco a poco, la situación familiar irá empeorando. Los ahorros menguan y los amigos de Vilaamil empiezan a darle la espalda porque consideran que es un pelma que no hace más que pedirles favores para encontrar trabajo. Este es el argumento de Miau (1888), una novela que Galdós escribió en apenas cinco semanas y a la que nunca dio demasiada importancia, a pesar de que es una de las más interesantes de su producción. De hecho, Leopoldo Alas “Clarín” le reconoció a Galdós en una carta: “He leído hace varias semanas Miau y me ha gustado mucho en general y mucho más en particular. No opino como usted que no sea más que las sobras de otra cosa”.

NACiONALES (EPiSODiOS) Con la publicación de Trafalgar, Benito Pérez Galdós iniciaba la que tal vez sea su obra más ambiciosa: sus “Episodios nacionales”. Más de 40 novelas que describen la historia de España desde 1805 hasta 1880, a través de las vivencias de personajes ficticios, que se ven inmersos en acontecimientos históricos y que se relacionan con personalidades reales de la época. Divididos en 5 series, entre los hechos que se cuentan en los Episodios están la Guerra de la independencia, la Primera guerra Carlista, la regencia de María Cristina, la boda de Isabel II y la Revolución de 1868.

ORO En 1870, Benito Pérez Galdós publicó su primera novela: La fontana de Oro, en referencia a un café situado en la Puerta del Sol, que era lugar de reunión de artistas y políticos liberales. Ambientada en el llamado Trienio Constitucional (1820-1823), en sus páginas se detallan diferentes acontecimientos históricos, como la llegada a España de los Cien mil hijos de San Luis, el levantamiento de Riego o las conspiraciones entre los partidarios y opositores al rey Fernando VII. Para los expertos, La fontana de Oro es la primera novela moderna española.

POLíTiCO Galdós siempre mostró un gran interés por la política española. De ideas liberales, le preocupaban los abusos de la monarquía corrupta de Isabel II y el atraso que, en temas como educación, investigación o costumbres, provocaba el gran poder que desplegaba la Iglesia católica. Por eso, en varias ocasiones, aceptó participar en política. La primera de ellas en 1886, cuando aceptó la propuesta de Sagasta de ser diputado por Puerto Rico (que todavía era colonia española), aunque el escritor jamás había pisado ese lugar. En 1907, fue elegido diputado por los partidos republicanos y, en 1909, presidió junto a Pablo Iglesias la coalición republicano-socialista.

QUiNTíN “La de san Quintín” es una obra de teatro escrita por Benito Pérez Galdós y estrenada en el Teatro de la Comedia (de la calle Príncipe) en 1894. En ella, el escritor canario cuenta una historia en la que se mezclan hijos naturales, amores extramatrimoniales, sobornos, chantajes, enlaces por conveniencia y cuyo final muestra a una duquesa venida a menos que huye a América para comenzar una nueva vida junto a su joven amante. La obra, una de las más populares de su autor, fue muy bien acogida por sus admiradores y criticada por sus detractores, que no veían nada bien todo ese catálogo de actitudes libertinas y amorales que, lejos de acabar con los protagonistas ardiendo en el infierno, tenía un final feliz.

RELiGiÓN Benito Pérez Galdós fue un escritor claramente anticlerical. Para él, el clero católico era un estamento de dudosa honestidad, que se dedica a atemorizar y someter a las clases más pobres, mientras que se enriquece a costa de los estamentos pudientes. Además de su dimensión política y social, las críticas de Galdós a la religión se centraban en su aspecto supersticioso y de oposición a la razón, lo que provocaba que España estuviera muy atrasada desde el punto de vista científico en comparación a otras naciones europeas como Francia, Inglaterra o Alemania.

SANTANDER A los 20 años, Galdós llegó a Madrid procedente de Canarias. En la capital permanecería el resto de su vida, salvo para hacer algún viaje esporádico o pasar el verano en Santander, ciudad a la que se desplazaba para huir del calor madrileño. En la localidad cántabra compró una casa en la playa de El Sardinero, que se conocía como “la finca de San Quintín”, en referencia una de sus obras más populares.

TORQUEMADA (FRANCiSCO) Se trata de uno de los personajes más recordados de Pérez Galdós. Este usurero tacaño y estratega protagonizó una tetralogía, formada por las novelas Torquemada en la hoguera (1889), Torquemada en la cruz (1893), Torquemada en el purgatorio (1894) y Torquemada y San Pedro (1895), en las que Galdós narra lo que le sucede a Torquemada cuando, casi en la vejez, se casa con una muchacha joven, cuya familia pasa grandes apuros económicos, pero que no por ello renuncia al lujo y a las comodidades. El nacimiento de un hijo discapacitado, la prematura muerte del niño y los abusos de todo tipo que constantemente sufre Torquemada por parte de su esposa y suegros, complicarán los últimos años de este personaje que, lejos de dar pena y provocar compasión, es temido por medio Madrid, ya que son muchos los ciudadanos que le deben dinero.

UNiVERSAL (EXPOSiCiÓN) En 1867, Galdós viajó a París para asistir a la Exposición Universal y contar como periodista lo que vio en la capital parisina, la cual no contaba todavía entre sus monumentos con la Torre Eiffel porque, aunque es cierto que también se erigió con motivo de una Exposición Universal, fue en la de 1889.

ViCTORiO MACHO El escultor Victorio Macho (1887-1966) fue el elegido para realizar el monumento en honor de Benito Pérez Galdós, que está colocado en el parque del Retiro de Madrid. La inauguración de la escultura, que se produjo el 20 de enero de 1919, contó con la presencia del propio Galdós, que ya por entonces estaba muy anciano y apenas podía ver. Por esa razón, pidió ser alzado para poder tocar con las manos el rostro de la escultura y apreciar así el trabajo de Macho.

WASHiNGTON Durante su adolescencia, Galdós mantuvo una relación sentimental con María Josefa Washington de Galdós, familiarmente conocida como Sisita. María Josefa era hija natural de un tío de Galdós y, cuando la madre del escritor se dio cuenta que los dos primos coqueteaban, decidió poner fin a la relación mandando al escritor a Madrid para que estudiara Derecho. La decisión materna fue muy dolorosa para el escritor, que reconoció en una carta a Leopoldo Alas “Clarín” que estuvo “algún tiempo atortolado, sin saber qué dirección tomar, bastante desanimado y triste”.

XII La Orden Civil de Alfonso XII se creó en 1902 para premiar a aquellas personas que destacaron por su labor en campos como la educación, la cultura, la docencia y la investigación, razones que hicieron que Benito Pérez Galdós la recibiera el mismo año de su creación. A finales de los años 80, la Orden de Alfonso XII se convirtió en la actual Orden de Alfonso X el Sabio.

YOYO La editorial Yoyo tiene una colección de audiolibros en los que diferentes narradores leen textos de importantes autores para aquellas personas que no puedan o no quieran leerlos por sí mismos. Entre las obras que tienen en catálogo están En busca del tiempo perdido, Rebelión en la granja, ¿Por quién doblan las campanas?, Cumbres borrascosas y dos libros de Galdós: Fortunata y Jacinta y Marianela en dos versiones: con acento latino y con acento ibérico. Para más información, pincha aquí.

ZUMALACÁRREGUi La tercera serie de las cinco, que componen los Episodios Nacionales, se abre con Zumalacárregui (1898), que cuenta algunos de los hechos protagonizados por el general carlista Tomás de Zumalacárregui, como el comienzo de la guerra civil en 1834 o el sitio de Bilbao en 1835, donde fue herido Zumalacárregui y posteriormente falleció.

                                                  (De Eduardo Bravo, el 19 de abril de 2018)

Referencias útiles:
EL MADRiD DE GALDÓS

¿CUÁNDO? El Viernes 20 de abril de 2018, (1) de 17h a 19h, (2) a las 21h30 y (3) durante todo el día.

¿QUÉ?
(1) Recorrido por los escenarios galdosianos;

(2) Vídeo Mapping: la Puerta del Sol recordará a su querido Benito Pérez Galdós en la fachada de la Real Casa de Correos con una coproducción de Yunou y Rgb Corp.

(3) Urban Sketchers se concentrarán en la Ruta “El Madrid de Galdós” para dibujar con sus lápices y pinceles los escenarios galdosianos seleccionados. Sus dibujos se podrán ver a partir del 26 de abril en la Biblioteca Regional Joaquín Leguina.

¿DÓNDE?
(1) y (3) El Ateneo de Madrid, la Iglesia de Santa Cruz, el Restaurante Botín, la Casa de Fortunata, el Teatro Real y la Academia de San Fernando.

(2) En la Real Casa de Correos (en la ilustración)
En la Puerta del Sol
28013 Madrid
M Sol

¿CUÁNTO? Entrada libre.

Para saberlo todo del Madrid de Galdós, conéctate a la web de LA NOCHE DE LOS LiBROS (también en Facebook y Twitter).

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