La escritora madrileña, Juana Doña (1918-2003), nacida en el barrio de Lavapiés, fue una infatigable luchadora antifascista. Con tan solo 14 años, se afilió a las Juventudes Comunistas. Durante la Guerra (in)Civil, colaboró en labores de retaguardia. Tras la contienda, formó parte de la guerrilla (clandestina) antifranquista hasta que, en 1947, fue arrestada y condenada a muerte. Afortunadamente, gracias a una campaña internacional para intentar salvarle la vida, Evita Perón, de paso por España, consiguió que su pena fuera conmutada por 30 años de prisión y Juana Doña ingresó en la cárcel de Ventas. Recuperada la libertad en 1961, se exilió con su hijo en Francia, donde siguió luchando por sus ideales de justicia social, y al morir Franco, volvió a España para participar activamente en el proceso de democratización del país.

   El Espacio de Igualdad de Arganzuela, barrio en el que la militante comunista vivió sus últimos años, lleva su nombre, y hoy, Lunes 20 y el próximo 27 de febrero, celebrará un café / tertulia literaria sobre su vida y obra. Mientras tanto, ¡no te pierdas (Mi Petit) Diccionario - Homenaje a la republicana feminista.

ALMENDROS (CAMPOS DE LOS) El escritor hispano-mexicano, Max Aub (1903-1972), es el autor de El laberinto mágico. Una obra formada por varios libros a través de los cuales se narran distintos eventos de la Guerra (in)Civil y de las vidas de los que la sufrieron. El último de ellos es Campo de los Almendros, en referencia al campo de concentración creado en la zona de Alicante, para acoger a los refugiados republicanos, que no pudieran abandonar el país después de que se cerrase el puerto de Valencia. En 1939, Juana Doña y su hijo quedaron atrapados en el Campo de los Almendros, a merced de unos vencedores que no se caracterizaron por su compasión.

BARCELONA El 18 de diciembre de 2003 Juana Doña falleció en Barcelona. Tenía 85 años. Entre sus proyectos inacabados estaba un libro sobre la situación de la mujer en el siglo XX: “Lo voy a dividir en 4 partes: la mujer durante la Monarquía de Alfonso XIII; La República, en la que las mujeres lo ganamos todo; la guerra, la represión y la posguerra y cómo retrocedimos a los códigos napoleónicos; y cómo vivimos ahora”, explicaba unos meses antes de morir al diario El País.

CASADO En marzo de 1939, el coronel Segismundo Casado, jefe del Ejército del Centro, se levantó en Madrid contra el gobierno republicano de Negrín que estaba en Valencia. Casado reclamaba que se pusiera fin a la guerra y, para ello, contaba con el apoyo de todas las fuerzas políticas de la zona republicana que entendían que, tras la caída de Cataluña, la contienda estaba perdida y no había razón para continuar alargando el sufrimiento de la población madrileña. El golpe provocó una guerra (in)civil dentro de la propia Guerra (in)Civil entre los casadistas y los defensores de Negrín. Eugenio Mesón, miembro de la Juventud Socialista Unificada y pareja de Juana Doña, fue detenido tras el golpe de Casado y encarcelado por defender que se continuase la lucha. Ante esa situación, Juana Doña marchó con su hijo hacia Valencia para intentar huir del país, pero acabaron confinados en Campo de los Almendros.

DiNERO Cuando finalizó la guerra, Eugenio y Juana pensaron que el otro estaba refugiado en Francia, pero no era así. Él estaba encarcelado en la prisión de Yeserías de Madrid y, ella, en el Campo de los Almendros, primero, y posteriormente en otras cárceles. Cuando fue liberada, consiguió averiguar el paradero de Eugenio y visitarle en la prisión antes de que fuera fusilado en 1941. Para poder entrar a verle, Juana utilizó documentación falsa. También tuvo que sobornar a uno de los sacerdotes de la prisión con chocolate, tabaco y dinero.

EViTA En 2017 se cumplen 70 años de la visita que Eva Perón, segunda esposa del presidente de la República argentina Juan Domingo Perón, realizó a Madrid. Durante su estancia en la capital y antes de continuar su gira por otras ciudades españolas, Evita quiso interceder por Juana Doña, que había sido condenada a muerte y estaba en prisión por haber colocado un artefacto explosivo en la embajada argentina de Madrid. Evita logró que las autoridades franquistas conmutaran la pena de muerte por 30 años de cárcel. En cambio, el resto de militantes, que habían participado en la acción, fueron fusilados.

FUGA En 1939, finalizada ya la Guerra (in)Civil y después de obtener la libertad, Juana Doña colaboró en un plan de fuga para liberar a varios dirigentes comunistas, que estaban prisioneros y en riesgo de ser fusilados. Finalmente el plan se llevó a cabo, pero fracasó en su objetivo.

GUERRiLLERA La militancia antifascista de Juana Doña la llevó a participar en diferentes acciones armadas como miembro de los grupos de guerrilla urbana, establecidos en Madrid. Además de servir de enlace entre diferentes miembros de la organización, Doña estuvo implicada en los ataques a la Brigada Político Social y la embajada argentina. Dos atentados con repercusión mediática, pero sin heridos, y que provocaron que Doña fuera nuevamente detenida y condenada a muerte en 1947.

HOMOSEXUALiDAD Tradicionalmente, las organizaciones comunistas no veían con buenos ojos las relaciones homosexuales. Las consideraban comportamientos desviados, propios de la depravación y decadencia de la burguesía y la aristocracia. El hombre nuevo no podía tener deseos ni mantener relaciones sexuales con personas de su propio sexo. Fueron muchos los militantes comunistas purgados o confinados en centros de reeducación por su opción sexual, y no solo en los países del bloque soviético. Ese tipo de persecución también se produjo en los países en los que el partido comunista estaba en la oposición o era clandestino. En España, el PCE suspendió de militancia en los años 50 a varias mujeres por ser lesbianas. Juana Doña, que por entonces se encontraba en la prisión de Guadalajara, criticó esta decisión y se opuso a la política homófona del PCE.

iGUALDAD Además de por el respeto a la diferencia, Juana Doña luchó por la igualdad de hombres y mujeres. Esa fue una de sus líneas de trabajo cuando se presentó como senadora cuando llegó la democracia a España tras la dictadura. De hecho, en referencia a las candidaturas de los partidos afirmaba: “Creo que, en las candidaturas de izquierdas, hay bastantes mujeres, pero muchas menos que hombres. La participación de la mujer no llega al 50% en ningún partido”. Una de las razones de esa lucha por la igualdad era el haber sufrido ella misma la desigualdad por ser mujer: “Conozco bien los problemas de la mujer porque los he sufrido en mi propia carne, y voy a defenderlos”.

JUVENTUDES Juana Doña se afilió a la Unión de Juventudes Comunistas de España en enero de 1933. Todavía no había cumplido los 15 años y ni siquiera sabía muy bien qué era “eso del comunismo”. Sin embargo, tenía claro que “queríamos una sociedad mejor”.

KGB La KGB son las siglas del servicio secreto soviético que en 1954 sustituyó al NKVD, que había tenido un importante papel en la Guerra (in)Civil y la II Guerra Mundial. Según algunos testimonios, los agentes soviéticos habrían llegado a un acuerdo con los alemanes para no fusilar a los espías nazis detenidos en la URSS. A cambio, Moscú habría exigido que se respetase la vida de los comunistas encarcelados tras el golpe de Casado, entre los que se encontraba Eugenio Mesón, esposo de Juana Doña. Cuando en 1941 Alemania invadió la URSS, las autoridades franquistas se vieron con las manos libres para cumplir la sentencia de muerte. Unas semanas después de la invasión, los detenidos fueron fusilados.

LiBROS Juana Doña volcó buena parte de sus recuerdos y experiencias como luchadora antifascista en diferentes libros. Entre ellos destacan Mujer (1977), Desde la noche y la niebla -en la que recopila relatos de mujeres que lucharon contra el franquismo- (1978), y Gente de abajo (1992), con el subtítulo “No me arrepiento de nada” y prologado por Manuel Vázquez Montalbán.

MUJERES En 1933 Juana Doña fue una de las fundadoras de la Agrupación de Mujeres Antifascistas, vinculada al Partido Comunista Español y centrada en la lucha feminista. Durante la Guerra (in)Civil cambió su nombre por Mujeres contra la Guerra y el Fascismo, y al finalizar la cruel contienda, se denominó Asociación de Mujeres Antifascistas Españolas. Esta organización continuó activa durante el exilio y el franquismo, pero fue duramente perseguida por los nazis y por la dictadura de Franco.

NOMBRES En la clandestinidad no es aconsejable utilizar los nombres reales. Tanto por la propia seguridad como por la de los demás compañeros y la de la organización. Durante su militancia, Juana Doña utilizó como nombre de guerra María Luisa. Además del nombre, también cambió su aspecto físico para evitar ser reconocida.

ÓDENA Paulina “Lina” Ódena García (1911-1936) fue una destacada militante comunista. Combatió en el Levantamiento de 1934 y formó parte del Socorro Rojo Internacional. Durante la Guerra (in)Civil, luchó en la zona de Andalucía. En septiembre de 1936, el chófer del automóvil en el que viajaba se equivocó de cruce y fue a parar a un control de carretera de la Falange. Entonces, antes de ser detenida, decidió suicidarse. Algunos testimonios, entre los que se encuentra el de Juana Doña, dudan de esta versión y sostienen que fue torturada y asesinada por los fascistas. Fuera como fuese, en recuerdo de su amiga, Juana Doña decidió llamar a su primera hija Lina (que moriría de meningitis a los siete meses).

PLACA En la calle Juan de Vera del madrileño barrio de Arganzuela, hay una placa conmemorativa que recuerda que en ese lugar residió Juana Doña durante los últimos 25 años de su vida. Fue colocada por el Ayuntamiento y, además de sus fechas de nacimiento y muerte, la placa incluye el siguiente texto: “Madrileña defensora de la libertad en España, de la democracia y de la igualdad entre hombres y mujeres”.

QUERiDO EUGENiO En 2003, Juana Doña publicó Querido Eugenio (una carta de amor al otro lado del tiempo). Un libro que tardó más de 50 años en escribir y que está dedicado a su marido Eugenio Mesón, fusilado cuando todavía no había cumplido los 25 años. “Tenía miedo de escribir ese libro”, explicó Doña al diario El País, “pero hace como año y medio me di cuenta de que no me queda mucho tiempo y no quería que el bloc de Genio, como le llamábamos en la familia, ni los nombres de los compañeros se perdieran en el olvido”. El libro incluye también una carta que Juana Doña escribe a su esposo que, al despedirse de ella, le pidió tres cosas: “Que educara a nuestro hijo en nuestros ideales, que siguiera siendo comunista y que rehiciera mi vida. Yo tenía 22 años y algunos amores tuve luego, pero no fue nada. El único hombre de mi vida ha sido Genio”.

ROSAS Las Trece Rosas fue un grupo de militantes de las Juventudes Socialistas Unificadas, fusiladas el 05 de agosto de 1939. Sus edades estaban comprendidas entre los 18 y 29 años y muchas eran compañeras de militancia de Juana Doña. Con algunas de ellas coincidió en la prisión de Ventas en Madrid antes de que fueran ejecutadas.

SENADO Con la llegada de la democracia, Juana Doña fue candidata a senadora en las listas de la Organización Revolucionaria de Trabajadores. Junto a Doña, en las listas iban otros militantes de izquierdas. Entre todos sumaban más de 80 años de condena en cárceles franquistas y 35 años de exilio. Según afirmó en 1977, se presentaba al Senado porque según ella “el Senado aquí, tal como está establecido, va a ser muy antidemocrático. Queremos que en ese Senado esté presente la voz de los trabajadores y en las listas electorales no vemos ningún trabajador que la pueda representar”. A la vista del funcionamiento de la cámara alta en todo este tiempo, no andaba muy desencaminada.

TORTURA Juana Doña sufrió diferentes tipos de tortura a lo largo de su vida. Durante los interrogatorios en comisaría sufrió golpes, descargas eléctricas, ahogamientos e incluso fue obligada a presenciar la muerte de un compañero de militancia. En prisión, esas torturas continuaron a través de, por ejemplo, las temporadas en las celdas de aislamiento. Sobre estas últimas recordaría: “La directora de la cárcel me dijo que ya podía irme a casa. Yo entendí que me mandaba a la celda, pues a las celdas las llamábamos casas. Me lo repitió: eres libre. No di las gracias. ¿Por qué? ¿Por haberme tenido en celdas de castigo?”.

URSS Como buena militante comunista, Juana Doña fue una defensora de la Unión Soviética. Aunque declaró que “la URSS hizo cosas mal, y por eso perdió la Guerra Fría”, también afirmaba que “en Rusia vivían mejor antes de la caída del Muro que ahora”. Eso no solo les habría sucedido a los ciudadanos de los países del Este. La propia Julia Doña afirmaría que, tras la caída del comunismo, “nos quedamos sin referente”.

ViLLARONGA En 2013 Agustí Villaronga dirigió la miniserie “Carta a Eva”. En ella, el realizador de “Tras el cristal” o “Pan negro” narraba la historia de la mediación de Eva Perón ante Carmen Polo y el dictador en favor de Juana Doña. La serie, emitida en La1 de Televisión Española, estaba protagonizada por Nora Navas en el papel de Juana Doña, Julieta Cardinali en el de Eva Perón y Ana Torrent como Carmen Polo.

WAGNER Las reclusas del penal de Ventas, en el que se encontraba prisionera Juana Doña, organizaron un coro en el que interpretaban diferentes composiciones. Desde canciones folclóricas a piezas de autores clásicos. No sería raro que uno de ellos fuera Wagner, pues hay testimonios que cuentan que el autor alemán formaba parte del repertorio de los coros que los presos habían organizado en otras prisiones del país.

XX En palabras de Juana Doña, la Defensa de Madrid “ha sido la gesta más importante del siglo XX en una ciudad. Un pueblo entero puesto en pie. Hice lo que hizo todo el pueblo. No me acosté en seis días, no me lavé la cara en seis días, comí tres veces en seis días... La palabra “vencido” era tabú en la España republicana”.

YESERíAS La prisión de Yeserías, en el distrito de Arganzuela, era un antiguo asilo de mendigos. Tras la guerra fue reconvertido en cárcel para presos políticos. Posteriormente y hasta 1991, fue una cárcel de mujeres. En la actualidad es el Centro de Inserción Social Victoria Kent. En la prisión de Yeserías estuvo recluido Eugenio Mesón. De allí saldría, junto a otros compañeros, para ser fusilado contra la tapia del cementerio del Este.

ZONA NEUTRAL Al final de la guerra, el puerto de Alicante fue declarada zona neutral. Allí se reunieron más de 25.000 personas esperando la llegada de barcos enviados por la Sociedad de Naciones, que los iban a rescatar, pero nunca llegaron. Los pocos buques que se atrevieron a acercarse a la zona fueron obligados a alejarse del puerto por la aviación franquista e italiana. Abandonados a su suerte, las personas refugiadas (como Juana Doña y su hijo) en el puerto fueron confinados en el Campo de los Almendros. Ante la situación, algunos se suicidaron pegándose un tiro o arrojándose al mar.

                                        (De Eduardo Bravo, el 20 de febrero de 2017)

Referencias útiles:
JUANA DOÑA EN MADRiD

(1) Café /Tertulia
¿CUÁNDO? El Lunes 20 de febrero de 2017, de 18h a 19h.

¿QUÉ? Café / tertulia temático y enfoque de género: a través de la figura de Juana Doña (su vida, su trayectoria, su activismo y su lucha) se abordarán, de forma transversal, temas de sensibilización, corresponsabilidad e igualdad en el distrito.

¿DÓNDE? En el Espacio de Igualdad Juana Doña (ver la ilustración)
Paseo de la Chopera, 10
28045 Madrid
915 881 718
M Legazpi

¿CUÁNTO? Entrada libre.

Para saber más del evento, conéctate a la web de MADRiD iGUALDAD (también en Facebook y Twitter).

(2) Para seguir la lucha por la justicia social, ¡no te pierdas las reuniones y acciones del COLECTiVO JUANA DOÑA ARGANZUELA en su web, su Facebook y su Twitter!

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