Resulta curioso que en la popular Enciclopedia Libre, tan inquirida en la red, de los ocho oficios que con toda la razón se le atribuyen, el de médico figure el último de la fila. José Miguel Monzón aka El Gran Wyoming, “humorista, presentador de televisión, actor, músico, escritor, columnista y médico”, un galeno licenciado que vistió la bata blanca fugazmente, mientras cumplía con la patria haciendo el servicio militar, también canta.

   Madrileño y vecino señalado del barrio de Prosperidad, vino al mundo un día de San Isidro de hace 61 años, y aunque lo hubiera querido, los ángeles jamás labraron sus terrenos, sencillamente porque no cree en ellos. Ni en los ángeles, ni en Dios. 

   El hombre de ojos grandes y azules, nariz bastante prominente, mayúscula cabeza y una considerable envergadura, presenta desde 2006 un programa de éxito llamado El Intermedio, junto a la periodista Sandra Sabatés, en un canal de televisión privado y progre, que paradójicamente forma parte de un grupo de comunicación bastante conservador. Poco le importa el detalle. La cosa funciona, él se divierte, sabe hacer equipo, y el público lo pasa en grande. Como todo lo que nos trasmite está escrito en un guión, es él quien llega más tarde hasta el plató, y además, no trabaja los viernes.

   Fines de semana de tres días, el sueño de la población activa, que le permite dar conciertos con su grupo de rock Los Insolventes. “Salgo con una banda de rock and roll para quitarme de la cabeza toda esta mierda que tenemos que contar cada día”, ha comentado. Ya lo dice el prólogo del programa: “Ya conocen las noticias, ahora les contaremos la verdad”. Wyoming, como le llaman acortando la resonancia de su apodo, consigue hacernos reír, mientras nos da las peores noticias. Cómo médico, hubiera sido impecable comunicando dolencias incurables.

   Han pasado muchos años desde que compaginó sus estudios con la música, especialmente el rock and roll, que practica desde que en España llevar el pelo largo era el uniforme oficial del maleante. Con Paracelso, El Gran Wyoming, allá por los 70, se casó artísticamente con un pianista, aburrido de su vocación religiosa, y apodado por ello El Reverendo. Su nombre era Ángel Muñoz, y murió tristemente en 2012. Trabajaron juntos casi una década, deleitando noches todavía ahumadas por el tabaco compulsivamente consumido dentro de los locales. Repitiendo una vez y otra más, así hasta mil, el jugoso repertorio de El Gran Wyoming y El Reverendo. Piano, talento y voz. En legendarios garitos como La Aurora o El Bóvedas, asegura Monzón haber perdido el respeto al escenario, pero jamás al público.

   Cada día más solicitado en esos oficios desordenados y noctívagos, amplió el espectro de su gracia, probando y aprobando papeles falsos y verdaderos, en cine y televisión. “¡Oh, Cielos!” (1994), “Muertos de risa” (1998), Manolito Gafotas en “¡Mola ser jefe!” (2000), “El florido pensil” (2002), “Vivancos 3” (2002), “Isi/Disi: alto voltaje” (2006) y, como director realizó uno de los 32 cortometrajes de denuncia social, que compusieron la serie “Hay motivo” (2004).  

   A El Gran Wyoming le gustan los calçots, la carne, hacer vino y beberlo. Tocar la guitarra, cantar flamenco, las playas de Cádiz, los caballos, versionar las canciones de su amigo el músico Rosendo Mercado, moverse en moto y las malas compañías. Siempre presta su voz a los menos favorecidos y a las causas más duras de pelar. La ausencia de pelos en la lengua, le ha convertido en diana de la ponzoña que destila disparos parte de la prensa y allegados más conservadores. Es claramente, la bestia negra del Partido Popular, y de muchos otros líderes de opinión, que presumen de tener el alma inmaculada. 

   Detesta que le afilien a siglas de las que jamás tuvo carné, la corrupción, la frivolidad, las injusticias y las redes sociales, que nunca frecuenta porque le recuerdan “a la almadraba del atún, donde uno entra, y ya no puede salir”.

   ¿Defectos? Confiesa solo uno, y asegura que es de nacimiento: su rapidez mental, que practica de manera espontánea, ya tenga o no un guión delante de sus ojos. Respecto al origen de su apodo, ha mentido tanto y tantas veces que renunciamos a saber por qué le llaman así, sin dejar de aplaudir a quien tuvo la ocurrencia.

   El próximo Viernes 17 de febrero de 2017, El Gran Wyoming estará en Vallecas para presentar su libro ¡De rodilla, monzón! en el Centro Cultural El Pozo. ¿Te lo vas a perder?

                                                      (De Sol Alonso, el 15 de febrero de 2017)

Referencias útiles:
¡DE RODiLLAS, MONZÓN!

¿CUÁNDO? El Viernes 17 de febrero de 2017, a las 19h30.

¿QUÉ? Acompañado por su editora Ángeles Aguilera, El Gran Wyoming presentará su libro ¡De rodillas, Monzón (Planeta), la primera entrega de sus recuerdos...
 
¿DÓNDE? En el Auditorio del Centro Cultural El Pozo (ver la ilustración)
Avenida de las Glorietas, 19-21
28053 Madrid
917 866 372
C El Pozo

¿CUÁNTO? Entrada gratuita con invitación (a recoger en la librería Muga, C El Pozo / Asamblea-Entrevias) y lista de espera abierta.

Para saberlo todo del evento, conéctate a la web de la LiBRERíA MUGA (también en Facebook y Twitter).

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