A finales de 2016, la centenaria firma madrileña inauguró de la mano de Jonathan Anderson, su flamante director creativo, la nueva Casa Loewe, en su local del barrio Salamanca. Tres plantas y más de 1.000 metros cuadrados que la convierten en la tienda Loewe más grande del mundo, en la que, además de las colecciones y los complementos de la firma, se puede ver una colección de arte contemporáneo elegido por el propio Anderson y una floristería. La inauguración vino acompañada de una exposición en el Jardín Botánico y con la presentación del libro autoeditado de fotografías, que recorre el pasado, presente y futuro de la firma en 592 páginas.

   Antes de descubrirla, ¡no te pierdas (Mi Petit) Diccionario, que propone un repaso por los más de 170 años de historia de la insigne firma gata.

AMAZONA En 1975 Loewe lanzó al mercado el bolso que se convertiría en su pieza más icónica. El momento aperturista, que vivía España después de más de 40 años de dictadura, era perfecto para sacar un bolso cuya esencia era el empoderamiento de la mujer. Diseñado por el italiano Dario Rossi, el Amazona fue el primer bolso flexible de la historia, sin forro y con las costuras por fuera. Huelga decir que la altísima calidad de su piel, Napa 7000, perteneciente a la colección Ante Oro (otro emblema de la marca), lo convirtió en una pieza de lujo rara y única. También fue con el Amazona Loewe cuando la firma comenzó a poner su anagrama a la vista por primera vez. Definitivamente, el amazona no es sólo el bolso más famoso de Loewe, sino también el más famoso de España.

BARQUiLLO Una de las primeras fábricas de Loewe estaba situada en la calle Barquillo, esquina con San Marcos. Durante la Guerra (in)Civil, fue militarizada y se utilizó el cuerpo para hacer cartucheras, correajes y otros artículos militares. 

CALiDAD La calidad de las pieles de Loewe es uno de los sellos de la casa. Una exigencia que le sitúa entre las firmas de lujo más selectas. Existe el denominado “tacto Loewe” que no es sino el que produce la napa de cordero entrefino español (el que se cría a la altura de los Pirineos) y está considerada la piel de mayor calidad del mundo.

DUQUESA DE LA CONQUiSTA Duquesa de la Conquista María, Natividad Quindós y Villarroel (1861-1953), fue una aristócrata española que entró a formar parte, con tan sólo 28 años, del reducido grupo de Damas al servicio particular de la Reina Victoria Eugenia. La duquesa conocía la tienda de Loewe de la calle Príncipe y en 1905 dio a conocer la marca en palacio. Poco tiempo después, el rey Alfonso XIII la convertiría en la firma oficial, proveedora de la Casa Real.

ENRiQUE LOEWE El primer Enrique Loewe y fundador de la saga, nació en 1844 en la ciudad alemana de Kassel. Llegó a Madrid en 1872, seducido por la creciente pujanza de la capital. Entonces, se asoció con unos artesanos del cuero de la calle Lobo (actual calle Echegaray), y 20 años después, abrió su propia tienda. Su hijo, el segundo Enrique Loewe, se hizo cargo del negocio, mientras su hermana, Julia Loewe, se emparentaba con otra gran empresa madrileña de origen alemán: Mahou. Durante los primeros años del siglo XX, el hijo se hizo cargo del negocio hasta que su inesperada muerte en 1934 obligó al tercer Enrique Loewe (Knappe), entonces un joven de 22 años, a tomar el relevo. Pese a la Guerra (in)Civil y las dificultades, el joven director abrió la tienda de Gran Vía, y consiguió reflotar la firma y convertirla en el gran imperio que es. En 1964, el cuarto y último Enrique Loewe entró a formar parte de la compañía, pese a la mala relación que mantuvo con su padre. Fue él quien creó en 1988 la Fundación Loewe. Con la compra de la firma por parte de LVMH, los Loewe dejaron de ser dueños de la firma que lleva su nombre, aunque Enrique Loewe Lynch ostenta el cargo de presidente honorario. La quinta generación de Loewe capitanea, eso sí, la Fundación, y al mando no se encuentra un quinto Enrique, sino Sheila, la hija de Enrique Loewe Lynch (rompiendo así con la cadena de Enriques).

FUNDACiÓN LOEWE  En 1988 Enrique Loewe Lynch creó la Fundación Loewe, la única rama de la empresa que sigue en manos de la familia. Creada para promover las artes en los campos de la poesía, la danza, el diseño, la artesanía, la fotografía y la arquitectura, otorga desde el año de su fundación Premios Internacionales de Poesía, uno de los más prestigiosos y mejor dotados de las letras españolas. Actualmente acaba de crear su Loewe Craft Prize, destinado a premiar a la mejor obra artesana. En 2002 la Fundación recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.

GRAN VíA En 1939, recién terminada la Guerra (in)Civil, Loewe inauguró su tienda de la Gran Vía, en la que introducían un nuevo concepto: el del escaparate circular. A partir de entonces, comenzó a hacerse famosa por sus espléndidos escaparates cargados de teatralidad. Cada uno de ellos era una obra de arte que invitaba a soñar, precisamente en un momento en el que la mayoría de la gente no tenía nada. La tienda del nº8 de la emblemática arteria madrileña fue diseñada por el arquitecto Francisco Ferrer Bartolomé, y hoy aún conserva su escalera curva, sus lámparas de araña, sus muebles de madera de caoba en la pared y lo más importante, según Sheila Loewe, “su alma”.

HEMiNGWAY Cuenta la leyenda que Ernest Hemingway (1899-1961) le regaló a Ava Gardner (1922-1990) un bolso Amazona. Sin embargo, dicho bolso salió al mercado 14 años después de la muerte del escritor. De lo que sí no hay duda es del gusto de ambos por Loewe, especialmente de la actriz, quien, al parecer llevó por primera vez a Hemingway a la boutique madrileña. Entre finales de los años 40 y la década de los 50, fueron muchos los artistas de Hollywood que visitaron Madrid y que, después de degustar cócteles en Chicote, gustaban de visitar la tienda de Gran Vía.

iNNOVACiÓN Aunque el leitmotiv de Loewe siempre ha sido el lujo clásico, su nuevo director creativo, J.W. Anderson ha apostado por la innovación y la modernidad para ofrecer una acertada reinterpretación de los códigos clásicos de la firma. Con Anderson la moda de Loewe se ha vuelto transversal y moderna, guiada por el concepto de “pasado, presente y futuro”, todo en uno.


J. W. ANDERSON En 2013 LVMH decidió nombrar director creativo de la centenaria firma española al joven y talentosísimo diseñador norirlandés, Jonathan William Anderson (retratado aquí), de apenas 29 años. Hijo de un entrenador de rugby y de una profesora de inglés, el “niño prodigio” de la moda afirmó estar emocionado con su responsabilidad en Loewe, y parece que cada paso que da es un nuevo acierto. 

KARL LAGERFELD En los años 60, gracias al visionario Enrique Loewe Lynch, el modisto y fotógrafo alemán, Karl Otto Lagerfeld (1933), colaboró con Loewe para la creación de las colecciones de prêt-à-porter. Armani también pondría su sofisticado sello en la marca.

LVMH En 1987, Loewe y la multinacional francesa del lujo Louis Vuitton - Moët Hennessy llegaron a un acuerdo para reforzar la presencia internacional de los españoles, pero en 1996, coincidiendo con el 150º aniversario de la firma, LVMH se convirtió en su dueña.

MEiSEL, STEVEN Cuando J.W. Anderson llegó a Loewe, contrató al fotógrafo estadounidense Steven Meisel para que le ayudara a reinterpretar los códigos de la firma con su particular punto de vista. Meisel es sin duda una de las figuras más misteriosas de la industria de la moda ya que no concede entrevistas y se esfuerza por mantenerse alejado de los focos, algo raro en una industria tan expuesta como es la de la moda. El tándem Anderson-Meisel parece enfocado a revolucionar las campañas clásicas de publicidad de moda a través de Loewe y a aportar la intelectualidad y buen gusto que tanto aprecia el norirlandés.

NARCiSO RODRíGUEZ El diseñador estadounidense de origen cubano, Narciso Rodríguez, fue el director creativo de Loewe entre 1997 y 2001. Con su colección de prêt-à-porter de 1998 fue la primera vez que la firma desfiló en París.

ORO, COLECCiÓN Pocas campañas de publicidad resultaron tan comentadas y ridiculizadas como la que realizó Luis Venegas en 2012 para anunciar el relanzamiento de la Colección Oro. Con la evidente intención de acercar al público joven a la centenaria firma, Venegas se rodeó de jóvenes supuestamente modernos, que en lugar de conectar con sus semejantes, provocó el efecto contrario. Polémica a parte, el famoso vídeo hizo que, durante unos días, no se hablase de otra cosa, y que, mientras la firma se negaba a dar explicaciones, los bolsos se agotaran en las estanterías.

PRíNCiPE, CALLE En 1872, Enrique Loewe Roessberg, un artesano alemán enamorado de Madrid, llegó a la Villa donde se asoció con los artesanos de marroquinería de la antigua calle Lobo (actual calle Echegaray). Veinte años después, abrió su propio local, en el que colgó por primera vez el cartel de Loewe en la puerta y que estaba situado en la calle Príncipe. Entonces, contaba con 24 dependientas, 3 obreras, 2 cortadores y 1 mozo.

QUiZÁS, QUiZÁS, QUiZÁS... El bolero “Quizás, quizás, quizás” del célebre Osvaldo Farrés (1902-1985) dio nombre a la fragancia femenina que creó la firma en 2003.

ROZAS, JOSÉ PÉREZ DE “Si Pérez de Rozas hubiera vivido en París, habría sido tan famoso como Christian Dior”. decía Enrique Loewe Lynch del que fuera su director creativo durante más de 30 años (de 1945 a 1978). José Pérez de Rozas fue el artífice, entre muchas otras cosas, de esos fastuosos escaparates que colocaron a la firma en el mapa, además de considerarse el precursor del “visual merchandising”. Loewe no habría sido lo que es hoy de no ser por el sofisticado buen hacer de Pérez de Rozas.

SERRANO Que el local de la calle Serrano haya sido el elegido para dar cobijo a la mayor Casa Loewe del mundo no se debe a la casualidad. La tienda, abierta en 1959, destacó entonces por su modernidad, ya que modificaba por completo el estereotipo de los establecimientos de artículos de lujo. Su arquitecto, el entonces prometedor Javier Carvajal (1926-2013), quiso renovar y revolucionar las formas de lo que debía ser una tienda de lujo, atendiendo a los materiales y a las líneas rectas y depuradas, en busca de la esencia y la intuición en contra de la opulencia que hasta ese momento había definido a las tiendas de lujo. Estableció escaparates abiertos y derribó las barreras entre el interior y el exterior, algo que hoy parece normal, pero hace 60 años simbolizaba la lucha de una país por abrirse a la modernidad sin rechazar sus códigos y señas de identidad. Poco después, en 1964, Carvajal consiguió el Premio a la Mejor Arquitectura Internacional de la Feria Mundial de Nueva York, con el pabellón que diseñó para la feria.

TALLER Loewe mantiene sus fábricas y talleres en España. Una de las más importantes está en Getafe, en la que además de centralizar la planta de producción y el centro de corte, también se ubican su nueva escuela de marroquinería y los talleres de desarrollo de bolsos y prêt-à-porter.

UBRiQUE El pequeño pueblo gaditano (famoso por el torero Jesulín) es un centro neurálgico mundial de la marroquinería española e internacional. En él producen sus artículos de piel marcas de la talla de Chanel, Givenchy, Dior, Cartier, Comme Des Garçons, Carolina Herrera y, por supuesto, Loewe.

ViCENTE VELA En 1970, el artista algecireño, Vicente Vela (1931-2015), fue el encargado de crear el icónico logo de las 4 eles de Loewe, también conocido como “El Cangrejo”. Enrique Loewe definió en numerosas ocasiones al artista como “la conciencia estética de Loewe”.

WATANABE, JUNYA En 2013, el diseñador japonés, Junya Watanabe (1961), creó una colección cápsula y en edición limitada para Loewe por encargo del entonces director creativo, Stuart Vevers. Pocos meses después, Vevers le pasaría el testigo a J.W. Anderson.

XMAS En Navidad, los escaparates y las tiendas de Loewe recuperan la herencia de José Pérez de Rozas transformándolos en efímeras obras de arte. Este afán por la decoración navideña es considerada una de las tradiciones más firmes de Loewe.

ZAPATOS Si bien es verdad que las colecciones de zapatos de Loewe no son lo más representativo de la firma, sus alpargatas para hombre y mujer, hechas a mano con las mejores pieles, como la napa, avestruz o su clásico ante oro, y yute traído de la India para la suela, conforman un básico de la firma que aúna tradición, modernidad y buen hacer.

                                               (De María Glück, el 09 de febrero de 2017)

Referencias útiles:
CASA LOEWE (en la ilustración)
Calle de Serrano, 34
28001 Madrid
915 776 056
M Serrano / Colón

Horario: de Lunes a Domingo, de 10h a 20h30.

Para seguir los pasos (re)creativos de LOEWE, conéctate a su web, su Facebook y su Twitter.

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