DETRÁS DE LA FACHADA - Mi Petit Madrid * - DETRÁS DE LA FACHADA (nº4): CALLE DE LARRA, 14

DETRÁS DE LA FACHADA (nº4):
CALLE DE LARRA, 14

Es extraño. A todo el mundo le suena el nombre de Larra, sea por los recuerdos lejanos y selectivos que guardamos de nuestro profesor de Lengua y Lite cuando nos tocó estudiar la biografía de ese escritor y periodista del siglo XIX, sea por la calle que lleva su nombre y que nos permite entrar por el norte de Malasaña aunque no sepamos exactamente dónde nace (en la calle de Barceló, haciendo esquina con Pachá) y dónde muere (en la calle de Sagasta, cerca de la Glorieta de Bilbao). Lo que se sabe menos es que, en esta misma calle, se encuentra también un magnífico edificio modernista homónimo, estrechamente vinculado a la Historia del periodismo de España, desde su construcción, a principios del siglo XX, y con el Arte, desde que el instituto Europeo Di Design lo convirtiera en su sede, en 1994. Y eso que no son los únicos tesoros que se esconden detrás de su fachada...

En 1907, exactamente trescientos años después de la construcción de los primeros Pozos de nieve (es decir, cuevas artificiales donde se guardaba la nieve en invierno para venderla con la llegada del buen tiempo), se iniciaron las obras del Edificio Larra al mismo tiempo que se diseñó el trazado y se abrió la calle donde se sitúa, creando lo que llamamos ahora una nueva manzana. El edificio fue proyectado por uno de los arquitectos de moda de la época, Jesús Carrasco-Muñoz y Encina (1869-1957), cuya obra conocemos todos, a lo mejor, sin saberlo, ya que realizó también los proyectos de la sede actual de la Caixa Forum Madrid, en 1899; la Botica de la Reina Madre, en la calle Mayor nº59, en 1913; y el Gran Hotel Reina Victoria, en la plaza de Santa Ana, en 1919. A pesar de las sucesivas fases de adaptaciones y ampliaciones que han ido transformando el Edificio Larra, la firma modernista de nuestro ecléctico arquitecto aparece tanto en su interior, con su planta trapezoidal, su patio interior y el sótano; como en la fachada, con sus cuatro grandes pilastras originales, sus dos plantas retranqueadas y su patio inglés.

Cuando se acabaron las obras de la finca en 1907, la redacción y los talleres de la revista Nuevo Mundo (precursor de nuestros suplementos domingueros semanales como su subtítulo lo indica “Crónica General de la Semana”) tomaron posesión del lugar inaugurando la tradición periodística del lugar. Al empezar la primera guerra mundial, sus ventas se dispararon, nunca mejor dicho, así como su prestigio y, en 1917, trasladó sus oficinas en la calle de Hermosilla nº57. La revista se adaptó como pudo al régimen dictatorial y propagandística del general Miguel Primo de Rivera (1923-1930), pero no consiguió competir con los nuevos medios de comunicación como el cine, la radio y el fotoperiodismo y la caída de la monarquía con la llegada de la Segunda República (1931-1939) hizo el resto. Cerró sus columnas, perdón, sus puertas, en 1933.

Mientras tanto, en la calle Larra, Nicolás María de Urgoiti, periodista y empresario fundador de la Editorial Calpe, creó el tándem perfecto con el lanzamiento, en 1917, del prestigioso diario El Sol y, en 1920, del diario vespertino La Voz, que marcaron un hito en la historia del periodismo al reunir bajo su techo y entre sus líneas a colaboradores como las grandes plumas de Unamuno, Valle-inclán, Marañón, Menéndez Pidal y Ortega y Gasset (ahora más conocido por su calle en la milla de oro que por sus obras, dicho sea de paso). A pesar del conflicto nacional, consiguieron mantenerse a flote hasta que el nuevo régimen establecido incautara, el 29 de marzo de 1939 (es decir, tres días antes del final oficial de la Guerra civil), el edificio y las instalaciones compartidas de El Sol y La Voz, convirtiéndolo en la sede del periódico falangista Arriba (como no).

El Edificio tuvo que esperar 40 años para recuperar su libertad de movimiento y pensamiento, es decir, hasta que el recién nacido y democrático Consejo de Ministros ordenara, el 15 de junio de 1979, el cierre definitivo de las rotativas franquistas (que, por cierto, utilizó, durante un tiempo (pero no conseguimos encontrar cuánto), el deportivo Marca, el famoso “diario de todas las aficiones”, pero también muy discreto a la hora de hablar de su pasado editorial). En cuanto a los propietarios sin nombres hasta ahora del edificio, sabemos que la Comunidad de Madrid, después de incluirlo en el Precatálogo de Edificios (protegidos) y Conjuntos de Madrid, en 1977, lo vendió a la Consejería de Cultura y Deportes, en diciembre de 1986, por 72 millones pesetas de la época, que lo vendió, a su vez, a la empresa editora del desaparecido diario Madrid, en mayo de 1987, por 93 millones (sin comentarios, bueno, venga, sí, pero solo uno. El diario Madrid (1939-1971) pudo permitírselo al ganar, con razón, por estas mismas fechas, el juicio contra el régimen político anterior que le obligó a cerrar por “discrepancia ideológica” -llamémoslo así- y cobrar los daños y perjuicios correspondientes).

Después de realizarse obras altamente vigiladas para que no se tocara la estructura protegida del conjunto, el edificio Larra volvió a cobrar vida y el instituto Europeo di Design lo eligió para establecer su sede, en 1994. Desde entonces, de los cursos de máster y del laboratorio creativo de la famosa escuela de diseño, comunicación visual y moda, de origen italiano, ha salido la creme de la creme de los creativos actuales, como lo demuestra su amplia Comunidad de ex-alumnos. Paralelamente a esta exitosa reconversión, el edificio reanudó con su pasado periodístico, en 2007, al acoger la Fundación Diario Madrid y sus archivos en oficinas de la segunda planta, donde se concede cada año el famoso Premio de Periodismo Diario Madrid.

El Edificio Larra como fiel testigo de los acontecimientos históricos del siglo XX cambió de milenio sin hacer ruido, como es él, discreto y digno. Después de un siglo de periodismo y de reivindicación política, apuesta por el diseño y la memoria colectiva. La próxima vez que vayas por Malasaña, date una vuelta por la calle Larra y visita este emblemático edificio madrileño.

Referencias útiles:
En el EDiFiCiO LARRA de la calle Larra nº14 (28004 Madrid - Metro Bilbao), encontrarás:
- La Fundación Diario Madrid: web.

- El instituto Europeo di Design (iED): más info en su web, Pinterest, YouTube, Facebook y Twitter. También puedes llamar al 914 480 444 o mandar un mail.

PD nº1: Si quieres saber más sobre los Pozos de nieve de Madrid y las bebidas refrescantes de la época, sacia tu sed con el artículo “Cuando medio barrio fue un nevero”, de Luis de la Cruz para Somos Malasaña (01.XI.2011).

PD nº2: Con “Detrás de la fachada”, Mi Petit Madrid pretender explorar los secretos mejor o peor guardados de los edificios emblemáticos o no de la capital. Si quieres compartir algunos con nosotras, aquí estamos y también aquí.

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Referencias útiles:
En el EDiFiCiO LARRA de la calle Larra nº14 (28004 Madrid - Metro Bilbao), encontrarás:
- La Fundación Diario Madrid: web.

- El instituto Europeo di Design (iED): más info en su web, Pinterest, YouTube, Facebook y Twitter. También puedes llamar al 914 480 444 o mandar un mail.

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Descubre los secretos mejor guardados que se esconden detrás de las fachadas madrileñas...