Promovido por Enrique Tierno Galván (1918-1986) y situado en el Parque epónimo, a unos 600 metros por encima del nivel del mar, el llamado Planetario de Madrid para los profanos y Planetmad para los entendidos es, gracias a la escasa contaminación lumínica de la zona- el mejor mirador de la ciudad desde su inauguración el 29 de septiembre de 1986. Detrás de su fachada futurista, el divulgador astronómico y agitador científico cumple a diario con su principal y singular misión: “devolver al visitante la interrelación perdida con el Cosmos y potenciarla mediante la divulgación del conocimiento astronómico en todas sus vertientes”.

   A partir de la segunda mitad del siglo XX, en Madrid como en la mayoría de las grandes urbes del mundo, el denominado y generalizado proceso de “vaciado industrial” -o de desindustrialización del interior de las ciudades y el consiguiente abandono del centro urbano por las fábricas hacia el extrarradio- cambió el uso del suelo (de industrial a residencial), transformando profundamente la cara visible de la Villa (¿y las cuentas invisibles de la economía especulativa?). A modo de ejemplo paradigmático (valga la redundancia), el distrito de Arganzuela, cercado por la Avenida de la Paz y el Río Manzanares, experimentó una de las mayores transformaciones que conoció la capital en los años 80 y 90, al convertirse en el escenario o eje principal del Pasillo Verde Ferroviario.

   Entonces, cuando en 1984 el proyecto (casi archivado en un cajón) de dotar Madrid de un Planetario volvió sobre la mesa, gracias al éxito rotundo de la exposición científica titulada “Cosmonáutica para la paz”, muy bien montada en el (ex) Cuartel del Conde Duque (por el Instituto San Miguel de Iniciativas Científicas en colaboración con la institución Joven Ciencia Española), el entonces alcalde Enrique Tierno Galván no dudó ni un minuto en cambiar el lugar de la sede del que sería el Observatorio astronómico más grande de España -originalmente prevista detrás del Templo de Debod, en la (ya contaminada) Plaza de España- para instalarlo en el Parque en construcción (en el Cerro de la Plata de Arganzuela), que había impulsado pero que nunca llegaría a ver.

   Sin saber nadie que se convertiría en la instalación de ocio municipal más visitada por los madrileños, el Planetario se levantó, siguiendo los planos de Salvador Pérez Arroyo, “donde antes había escombreras y terraplenes como piedra angular de un nuevo parque que cumpliendo con su deber de justicia, gratitud y reconocimiento llevará el nombre de Tierno Galván”, como lo anunció el alcalde Juan Barranco durante su discurso inaugural, el 29 de septiembre de 1986. Si no todos los madrileños se acuerdan de ese discurso, a lo mejor sí les suene el concierto en directo que dio Miguel Ríos, al día siguiente, en el flamante Planetario, para presentar su último trabajo casualmente titulado “El año del cometa”...

   Desde sus inicios, las instalaciones del Planetario se reparten entre una Torre de Observación de 28 metros de altura con un telescopio refractor; una Sala de Proyección con una cúpula semiesférica (en la que se proyecta el espectáculo del cielo); una Sala de Exposiciones; y la diáfana y circular Sala de Astrónomos para eventos espaciales. En constante (r)evolución como la mayoría de los astros que observa de cerca, la dinámica institución organiza desde conciertos bajo las estrellas hasta observaciones bajo la mirada atenta de expertos y precisa de telescopios así como exposiciones temporales y proyecciones espaciales con el único propósito de revelarte los secretos del Universo.

   A punto de celebrar 30 años de experiencia y excelencia y sus más de 5 millones de visitantes, el Planetario de Madrid hace realidad nuestro viejo sueño de tocar el cielo... y el famoso refrán, “De Madrid al cielo y un Planetario para verlo”.

PD: Observación del eclipse total de luna (llena), que tendrá lugar esta noche:
¿CUÁNDO? El Domingo 28 de septiembre de 2015, de 2h30 a 6h30 de la madrugada.

¿QUÉ? "La superluna llena de esta noche, que teñirá los parques y las calles de ocre y que simboliza los cambios que experimenta la Naturaleza, durante este periodo del año, para enfrentarse al frío del invierno y prepararse para su renacimiento, en primavera, coincide con un eclipse total del astro... [Leer más].

¿DÓNDE? En la entrada principal del Planetario de Madrid
M Méndez Álvaro o Arganzuela-Planetario

¿CUÁNTO? Actividad gratuita.

Referencias útiles:
PLANETARiO DE MADRiD
Avenida del Planetario, 16
28045 Madrid
914 673 898 (Teléfono de información con contestador automático)
914 673 461 (Teléfono de contacto y de reservas de grupos)
M Méndez Álvaro o Arganzuela-Planetario (L6)
Bus 8, 102, 148, 152 y 156

Horario:
- De Martes a Viernes: de 9h30 a 13h45 y de 17h a 19h45;
- Los Sábados, Domingos y Festivos: de 11h a 13h45 y de 17h a 20h45.

Precio: Actividades gratuitas. Excepto para la Sala de Proyección:
- Adultos: 3,60 euros;
- Menores de 14 años y mayores de 65 años: 1,65 euros;
- Grupos de más de 15 personas con cita previa: 2,80 euros por persona.

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