Desempeñó un papel activo en la vida intelectual de la Viena fin-de-siècle, siendo una de las personalidades más polémicas de su tiempo. Su cosmopolitismo lo convirtió en un moralista de la arquitectura y un crítico observador de las nuevas formas de cultura y de conducta cotidiana, basada sobre todo en el vestir, el comer y el habitar. 

   Con motivo de la muestra “Adolf Loos (1870-1933). Espacios privados”, organizada por CaixaForum en colaboración con el Museu del Disseny de Barcelona, en la que se incluyen objetos, mobiliario doméstico, fotografías y planos, que demuestran la trascendencia de la obra del arquitecto y diseñador austriaco, he aquí (Mi Petit) Diccionario sobre “el albañil que sabía latín”, que tuvo una vida tan admirable como turbulenta.

ALBAÑiL En 1893, Adolf Loos (retratado aquí) viajó a Chicago para visitar la Exposición Universal que se celebró en esa ciudad. En Estados Unidos permaneció los siguientes 3 años, desempeñando diferentes empleos, entre los que se encontraban lavaplatos, periodista y albañil.

BRNO Situada en la Región de Moravia Meridional, a medio camino entre Austria y Eslovaquia, Brno es la segunda ciudad más importante de la República Checa. Adolf Loos nació en esa localidad el 10 de diciembre de 1870, cuando todavía permanecía al Imperio austrohúngaro, razón por la cual es considerado austriaco, aunque posteriormente se nacionalizó británico.

CROQUiS (EL) Además de una prestigiosa revista especializada en arquitectura, la editorial madrileña El Croquis publica una colección de textos representativos de la historia de esa disciplina. Su catálogo incluye títulos como “La arquitectura de nuestro tiempo”, de Otto Wagner (1841-1918), la autobiografía de Frank Lloyd Wright (1867-1959) y dos volúmenes con los escritos completos de Adolf Loos. El primero incluye los textos publicados entre 1897 y 1909 y el segundo los de 1910 y 1933.

DRESDE Adolf Loos no fue un buen estudiante, lo que hizo que no pudiera entrar en la escuela de arquitectura. En su defecto, se matriculó en la Escuela de Arte y Oficios de Reichenberg y más tarde en la Escuela Politécnica de Dresde. Esa falta de interés por los estudios hizo que el joven Loos tardase bastante en conseguir el título de arquitecto. Se ve que, en lugar de estudiar, Adolf se pasaba el día y la noche de juerga, visitando los bares, cafés y burdeles de Viena.

ESTÉRiL Sus frecuentes visitas a los prostíbulos de la capital austriaca hicieron que Adolf Loos contrajese la sífilis. Esta enfermedad, incurable en su época, provocaba infinidad de enfermedades derivadas como, por ejemplo, la esterilidad, que aquejó a Loos cuando apenas tenía 23 años. A partir de ese momento, su familia lo repudió y él decidió marcharse a conocer mundo.

FRANCiA Durante 1924 y 1928, Adolf Loos residió en París, una ciudad con la que había tenido cierto contacto a raíz de la Exposición Universal de 1900 y del Salón de Otoño de 1923. Durante el tiempo que estuvo viviendo en Francia, Loos publicó su primer libro de ensayos y realizó muchos proyectos, de los cuales se construyeron muy pocos. Entre los que sí se hicieron realidad, estaba la casa del poeta rumano Tristán Tzara (1896-1963), cofundador del movimiento antiarte conocido como dadaísmo.

GOLDMAN La sastrería Goldman & Salatsch es una de las obras más conocidas de Adolf Loos. Su planteamiento austero hizo que solo los 3 primeros pisos tuvieran adornos de mármol, siendo el resto de la fachada lisa y sin ornamento alguno. Esta estética, que contrastaba con el estilo barroco y recargado del Palacio de los Habsburgo situado enfrente de él, generó un gran escándalo en su momento. De hecho, en 1911 Loos tuvo que dar una conferencia, a la que acudieron 2.000 asistentes, para explicar el diseño del edificio.

HOTEL En 1923, inspirado por una novela del escritor británico Arnold Bennett (1867-1931), Adolf Loos proyectó “The Grand Babylon Hotel”, un edificio que debía ser construido en Niza y que estaba formado por dos bloques en forma de zigurat, que albergarían 700 habitaciones, todas ellas exteriores. El interior de las dos pirámides estaría lleno de zonas de ocio, tiendas, espacios deportivos, una pista de baile y una pista de hielo. Aunque el proyecto fue presentado en el Salón de Otoño de ese año, nunca se llegó a construir.

iGLESiA En 1899, Adolf Loos proyectó una iglesia que iba a ser erigida en Viena, en conmemoración del jubileo del káiser Francisco José. Como sucedió con el Babylon Hotel y muchos otros trabajos de Loos a lo largo de su carrera, la iglesia no llegó a ser construida.

JOSÉPHiNE BAKER La cantante y bailarina estadounidense, nacionalizada francesa, Joséphine Baker (1906-1975), se convirtió en una de las estrellas más populares de los años 20 y 30 en todo el mundo. Miles de personas quedaron asombrados de su talento y belleza. Entre ellos, el arquitecto Adolf Loos que, conociendo sus costumbres, posiblemente llegó a verla actuar en directo, aunque no hay pruebas que confirmen que se llegaran a conocer. Lo que sí se sabe es que Loos decidió diseñar una casa para la artista, que aparentemente nunca supo el detallazo que el austriaco había tenido con ella. En 1927, Loos proyectó una casa revestida de mármol blanco y negro que nunca se llegó a construir, pero de la que sí existe una maqueta en madera, que da fe de esta declaración de admiración ¿o amor? en forma de proyecto arquitectónico.

KARMA (ViLLA) En enero de 1903, el profesor vienes de fisiología Theodor Beer encargó a un por entonces joven Adolf Loos la reforma de su villa situada a orillas del lago Leman en Suiza. El arquitecto sugirió levantar una planta al edificio y ampliar su superficie en varios de sus lados y, aunque Beer estuvo de acuerdo, la obra se paralizó en diferentes ocasiones por las discrepancias surgidas entre dueño y arquitecto. Finalmente, en 1906 Loos abandonó el proyecto, que fue concluido por Hugo Ehrlich pocos meses después. Aún así, la denominada Villa Karma es un ejemplo excepcional de la “teoría del revestimiento” de Adolf Loos...

LATíN Una de las frases más recordadas de Adolf Loos es aquella que afirma que “un arquitecto es solo un albañil que sabe latín”. Otros de sus pensamientos son: “La casa debe agradar a todos, a diferencia de la obra de arte que no tiene por qué gustar a nadie. La obra de arte es un asunto privado del artista. La casa no lo es”; “Sólo hay una pequeña parte de la arquitectura que pertenezca al arte: el monumento funerario y el monumento conmemorativo. Todo lo demás, lo que sirve para un fin, debe quedar excluido del reino del arte”; y también, “La evolución de la civilización es sinónimo de eliminación del ornamento del objeto cotidiano”...

MUSEUM (CAFÉ) Desde su inauguración en 1899, el Café Museum se convirtió en uno de los centros de reunión de Viena. Su decoración fue encargada a Adolf Loos, que realizó un trabajo sencillo y funcional, completamente alejado de las tendencias arquitectónicas de la época. Esta falta de ornato hizo que un periodista vienés se refiriera a él maliciosamente como “Café Nihilismus” (algo así como “Café de la nada”), algo que no impidió que entre sus asiduos se encontraran personalidades como Elias Canetti, Gustav Klimt, Oskar Kokoschka, Karl Kraus, Joseph Roth y el mismísimo Otto Wagner.

NORTH MiCHiGAN En la intersección de la avenida North Michigan con la avenida Austin y la calle Saint Clair de la ciudad de Chicago, se levanta el edificio del Chicago Tribune. Construido por los arquitectos Raymond Hood y John Mead Howells, el proyecto arquitectónico fue seleccionado a través de un concurso en el que participaron destacados profesionales, como Walter Gropius y Adolf Meyes, Bruno y Max Taut, Hugo Häring y Adolf Loos. El arquitecto vienés propuso la creación de una enorme columna dórica en cuyo interior se colocarían las maquinarias y oficinas del periódico. Un proyecto sencillo y rompedor que buscaba contrastar con el resto de edificios de su entorno. Sin embargo, los propietarios del Chicago Tribune se decantaron por un diseño más convencional, lo que no agradó a Loos, que afirmó: “La gran columna de estilo griego, dórico, será construida. Si no en Chicago, en cualquier otra ciudad. Si no para el Chicago Tribune, para cualquier otra entidad. Si no por mí, por cualquier otro arquitecto”. A día de hoy, la profecía de Loos aún no se ha cumplido.

OTRA (LA) En 1903, Adolf Loos creó su propia revista de arquitectura a la que llamó Das Andere que, en castellano, significa “La Otra”. La publicación era una crítica a las costumbres y los conceptos estéticos imperantes en su época, hasta el punto de llevar el provocador subtítulo de “Un diario para la introducción de la cultura occidental en Austria”. En ella se hablaba de temas muy diversos, desde la moda al sexo y se alababa la cultura anglosajona. Solo se publicaron dos números, que han sido reeditados en edición facsímil por la editorial Lars Müller Publishers.

PEDERASTiA En 1928, Adolf Loos se vio envuelto en un escándalo de pederastia. Según el padre de una niña de 9 años, el arquitecto contrató a su hija y dos amigas más, de 8 y 10 años, para que posasen como modelos y les hizo proposiciones sexuales. Antes del juicio, Loos llegó a pasar una corta temporada en prisión, pero su fortuna, que le permitió contratar a uno de los mejores bufetes de abogados de Viena, y la presión social ejercida por sus admiradores y discípulos, hicieron que las autoridades judiciales le pusieran en libertad…

QUiEBRA A pesar de esa fortuna, la vida disoluta y excesiva de Adolf Loos provocó que el arquitecto y escritor acabase sus días en la miseria. Una situación a la que también contribuyó una enfermedad nerviosa, que devino en demencia y que hizo que tuviera que ser ingresado en el sanatorio Kalksburg de Viena.

REVESTiMiENTO (TEORíA DEL) La “teoría del revestimiento”, enunciada por Adolf Loos y utilizada en varios de sus proyectos, consistía en utilizar los materiales para separar las diferentes funciones espaciales de un local o vivienda. Siguiendo esta teoría en, por ejemplo, Villa Karma, Loos mantuvo la fachada sin ningún ornamento y revistió el interior de la vivienda con mármoles que cubrían suelos, paredes, columnas y techos. A la “teoría del revestimiento” se suman otras dos: la “teoría del aterrazamiento”, que defiende que se pueda acceder a la terraza desde cualquier dormitorio como símbolo de libertad personal, y la “teoría Raumplan”, que sostiene que las habitaciones deben tener diferentes alturas según las funciones que se vayan a desarrollar en ellas.

SORDO Adolf Loos heredó de su padre, cantero de profesión, la sordera. Esta discapacidad le fue detectada a la edad de 12 años y se fue agravando con el paso del tiempo hasta que, al final de sus días, dependía de terceras personas para comunicarse correctamente con la gente. Algunos autores han visto en este hecho una explicación a su sistema de ideas, basado en el rechazo de las modas y las tendencias efímeras. Para esos autores, la sordera de Loos no sería únicamente física sino que se ampliaría a todas aquellas cosas que el arquitecto no quería escuchar.

TATUAJES Uno de los textos claves de Adolf Loos es Ornamento y Delito. Publicado en 1908, su escrito reacciona contra las corrientes arquitectónicas de la época y su tendencia a la ornamentación sentando las bases de lo que será la arquitectura moderna. La tesis principal, que maneja Loos en este trabajo, es que el adorno es una característica de sociedades primitivas y poco evolucionadas. De hecho, la aversión de Loos al ornamento, le lleva a afirmar que los tatuajes son un signo de atraso estrechamente relacionado con el crimen y la delincuencia. Las personas tatuadas, según el vienés, si no han estado en prisión, antes o después, lo estarán.

URBANiSMO Adolf Loos también se preocupó por el desarrollo urbanístico de las ciudades. De hecho, llegó a trabajar en la Oficina de Urbanismo de Viena, a través de la cual proyectó barrios obreros en los que las zonas verdes tenían una gran importancia. Al final, las dificultades que la burocracia imponía a la hora de llevar a cabo sus ideas, hicieron que renunciase al puesto.

ViLLA MÜLLER En 1928, el empresario Müller Frantisek encargó a Adolf Loos el diseño de su vivienda familiar. Una de las condiciones era que, como él se dedicaba a la comercialización de hormigón armado, la vivienda debía estar construida con ese material. Como es habitual en los proyectos de Loos, la fachada era muy sencilla, mientras que los interiores eran elegantes y con diferentes alturas según el uso de cada estancia. Situada en Praga, cuando se instauró el sistema comunista en el país, la casa fue nacionalizada y se le dio un uso oficial, aunque se permitió a la viuda continuar viviendo en algunas zonas del edificio. La caída del muro de Berlín hizo que la familia Müller recuperase la propiedad, momento en el cual los herederos decidieron venderla. En la actualidad y después de una completa restauración gracias a una campaña ciudadana, que impidió que el edificio se enajenase y se echase a perder, Villa Müller acoge una sala de exposiciones y un centro de documentación sobre Adolf Loos.

WiTTGENSTEiN, LUDWiG El autor del Tractatus Logico-Philosophicus y Adolf Loos fueron muy buenos amigos. Ambos compartían su aversión por el ornato y lo superfluo, hasta el punto de que, cuando la hermana de Wittgenstein le pidió al filósofo que ayudase al arquitecto Paul Engelmann (1891-1965) en la construcción de su vivienda, Wittgenstein echó mano de las teorías de Loos para diseñarla. El resultado fue la Casa Wittgenstein de Viena, un edificio racionalista de pareces blancas con una sencilla fachada y sin ningún tipo de adorno. La casa es, sin duda, la confirmación de la frase que Loos le dijo a Wittgenstein en una ocasión: “Tú eres yo”.

XX Adolf Loos es, junto a nombres como Alvar Aalto, Le Corbusier, Walter Gropius y Van Der Rohe, uno de los arquitectos más destacados del siglo XX. De entre todos ellos, Loos tal vez sea el que mejor marca las distancias con el siglo XIX, al reivindicar una nueva forma de diseñar edificios basada en la idea de funcionalidad y sencillez, que inspirará a corrientes y escuelas posteriores como, por ejemplo, Bauhaus.

YEDRA La sencillez ornamental de las fachadas proyectadas por Adolf Loos permitieron que, en muchas ocasiones, fueran colonizadas por la vegetación y la yedra que escalaba por los muros. Eso es justamente lo que sucedió con la Casa Steiner, construida en Viena en 1910.

ZOTTi, JOSEF El arquitecto austriaco, Josef Zotti (1882-1953), es conocido por su faceta como diseñador de mobiliario, algunas de cuyas piezas fueron utilizadas por él mismo cuando recibió el encargo de remodelar el Café Museum a principios de los años 30 del siglo XX. Las ideas de Zotti decoraron el local austriaco hasta 2003, cuando los dueños del negocio decidieron devolverle la apariencia que le había dado Adolf Loos en origen. Pero, en 2010, debido a un nuevo cambio en la propiedad, el café recuperó el aspecto que le había dado Zotti.

                                            (Eduardo Bravo, el 08 de mayo de 2018)

Referencias útiles:
ADOLF LOOS. ESPACiOS PRiVADOS

¿CUÁNDO? De Lunes a Domingo, de 10h a 20h, hasta el Domingo 24 de junio de 2018.

¿QUÉ? Organizada por CaixaForum en colaboración con el Museu del Disseny de Barcelona, “Adolf Loos. Espacios privados” es la primera exposición en España dedicada a Adolf Loos (1870-1933), figura clave de la arquitectura moderna vienesa, que repasa su singular concepción de la arquitectura y el interiorismo.

¿DÓNDE? En CaixaForum (en la ilustración)
Paseo del Prado, 36
28014 Madrid
913 307 300
M Atocha

¿CUÁNTO? 4 euros.

Para saber más de la muestra, conéctate a la web de CAiXAFORUM (también en Facebook y Twitter).

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